Sr. vigilante, déjeme salir



Dois Rios es una playa de Ilha Grande, una isla muy grande, frente a Angra dos Reis, cerca de Rio do Janeiro. Esa torre de vigilancia mira hacia la playa, que debe estar a unos 150 metros. Una súper playa. Las paredes perimetrales del ex Instituto Penal Cândido Mendes,

conhecido como o Presídio da Ilha Grande. Palco de histórias cinematográficas como a fuga do traficante conhecido como “Escadinha” (em decorrência deste episódio), que fugiu do presídio no ano de 1986 se agarrando à escada de um helicóptero que veio em seu resgate. Também estiveram por lá presos ilustres como o escritor Graciliano Ramos e presos políticos, como Fernando Gabeira. Outra figura lendária foi o preso conhecido como Madame Satã. Um travesti do bairro da Lapa (Rio de Janeiro) que numa briga na noite boêmia, levou à morte o cantor e compositor Wilson Batista [www.angra-dos-reis.com].

… siguen en pie, pero adentro está todo derrumbado, implosionado. Alguien dijo (además de JP) que en ese lugar se gestó y formó el Comando Vermelho, facción protagonista en el desarrollo de la política y el tráfico de la fabela carioca. El diario más vendido de San Pablo lo daba a conocer hace unos años –en una noticia manoteada al azar- así:

O Comando Vermelho foi criado em 1979 no presídio Cândido Mendes, na Ilha Grande (RJ), a partir do convívio entre presos comuns e militantes dos grupos armados que combatiam o regime militar.
Surgiu a partir da Falange Vermelha, com o lema “Paz, Justiça e Liberdade” e institucionalizou o mito das organizações criminosas no tráfico do Rio. Os principais fundadores foram Willians da Silva Lima, o "Professor", Paulo César Chaves e Eucanã de Azevedo.
A cocaína foi a responsável pela grande ampliação do poder do CV, na virada dos anos 70 para os 80. O Brasil entrou definitivamente na rota da droga, como ponto de distribuição para a Europa e como mercado consumidor do produto de baixa qualidade.
[Folha online. 13 septiembre 2002].


En el presidio hay un único y pequeño edificio donde tal vez viva alguien. Uno de los cuartos de esa construcción es un calabozo. En el calabozo, que estaba cerrado, había entre tres y cinco perros que lloraban un poco hacia nosotros.
Faltaba volver; lloviznaba un poco, además. A 15 minutos de comenzado el retorno se largó una típica tormenta tropical. Tardamos dos horas de lluvia intensa. Al principio estuvo bueno, un rato.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

reportero del paraíso del infierno, qué lindo que es leerlo y ver sus fotos, hace bien

Anónimo dijo...

Que lugar!! pueblo fantasma, carcel tenebrosa, agua, mucha agua.
Una cosita: agranden la foto y miren arriba de la ventanita, dice MORTE A LA ELITE. Grosooooooo!! Aguante el Comando Vermelho!! jaa

PD: que facha el pibe de la foto anterior..